Nuestro mundo en crisis
N
uestra reunión de este
m
es de octubre será el jueves día
13,
según se acordó en la reunión anterior
.
Q
uedó pendiente de decidir el te
m
a a tratar
. H
asta ahora no hubo una propuesta concreta
;
lo
va
m
os a considerar y proponer ahora
. S
olemos ocuparnos de dos tipos de temas de estudio y
debate
:
la proble
m
ática de la
I
glesia y la de la sociedad
. A
la
I
glesia le he
m
os dedicado bastante
atención últi
m
a
m
ente
,
con el estudio del libro
: “E
l
E
vangelio
m
arginado
”,
y el cuestionario
del
S
ínodo de la sinodalidad
. A
otro tipo de proble
m
as le dedica
m
os sólo una reunión
,
cuando
e
m
pezó la guerra de
U
krania
. A
hora debe
m
os volver a esa cuestión
. E
l conflicto de
U
krania se
está evidenciando
,
cada vez
m
ás
,
una confrontación entre bloques
,
una especie de inicio de guerra
m
undial
. C
ada día se avanza más hacia esa tragedia
. L
os contendientes no dan ni un solo paso
para poner fin al conflicto
,
al contrario
,
cada día van to
m
ando iniciativas que agravan más la
situación; últimamente incluso se habla del posible uso de armas nucleares.
Cuando hablamos de confrontación entre bloques nos referimos al hecho de que la OTAN
está siendo un protagonista importante en el conflicto. Su implicación afecta también a
nuestro país por la nefasta decisión de integrarnos en ese bloque militar. No nos vamos a
librar de las consecuencias que va a generar, que está generando ya, la guerra. Nuestro
mundo está en una crisis que se agrava sin cesar. Vamos a examinar algunos de los signos
de la crisis que nos acecha. Se está percibiendo en nuestro entorno la degradación del nivel
de vida de la población; los precios suben sin cesar y todo indica que en los próximos
meses aumentará la inflación y la carestía de los recursos necesarios.
L
a batalla política que está teniendo lugar en nuestro país sobre el te
m
a de los i
m
puestos tiene
por objeto engañar una vez
m
ás al pueblo
. E
sto puede ser un te
m
a a debatir en nuestra próxi
m
a
reunión
. E
n este nú
m
ero del boletín se incluyen varios de textos que fueron seleccionados justa
-
m
ente porque aportan luz sobre este te
m
a
. E
n un contexto de lucha de clases
,
co
m
o es nuestra
sociedad
,
no se puede hablar a
m
bigua
m
ente
,
en abstracto
,
sobre i
m
puestos; hay que aclarar a
qun se quiere au
m
entar o rebajar los i
m
puestos
. Y
sobre todo
,
hay que aclarar para q sirven
los i
m
puestos
. S
obre estos te
m
as hay
m
ucha confusión interesada en posiciona
m
ientos poticos
que se vienen haciendo últi
m
a
m
ente en
E
spa
. L
a derecha política es haciendo una bandera
del eslogan
B
ajada de i
m
puestos
,
de una
m
anera genérica
,
sin precisar de qué se trata real
m
ente
.
Al
hacer esa propuesta
,
seguro que no se está pensando en bajar las retribuciones de los parla
-
m
entarios y tantos cargos públicos que se nutren de los i
m
puestos
. T
a
m
poco se piensa en dejar
de pagar
,
o rebajar
,
el tributo a la gran potencia i
m
perialista do
m
inante a escala
m
undial
,
en for
m
a
de co
m
pra de ar
m
as
;
eso ta
m
bién sale de los i
m
puestos que paga
m
os
. E
ntonces
, ¿
qué reper-
cusión tendría en realidad la bajada de i
m
puestos reclamada por la derecha
? L
os i
m
puestos
sirven ta
m
bién para sostener los servicios sociales
:
sanidad
,
pensiones
,
educación
H
e ahí la
verdadera víctima de la solicitada bajada de i
m
puestos
. S
abe
m
os que en la etapa de gobierno
de
R
ajoj esos servicios sufrieron
recortes, y en las co
m
unidades autóno
m
as regidas por el
PP
es evidente el deterioro de los servicios sanitarios y educativos. La finalidad de la derecha es
la privatización de esos servicios
:
que tengan sanidad
,
educacn y seguridad quienes puedan
pagárselos. Y para alcanzar ese fin se cuenta con la ignorancia y colaboración de las clases
sociales que resultarían perjudicadas.
La ignorancia de los pueblos y sus clases oprimidas se manifiesta también en otro tema de
actualidad de nuestro mundo en crisis. Se trata del auge que está adquiriendo el fascismo,
B
oletín nú
m
. 32
- 4 de octubre de 2022
como vimos recientemente en Italia. Ese movimiento político progresa también en otros
países europeos
: H
ungría
, S
uecia
, F
rancia
, A
le
m
ania
, P
olonia
e incluso en nuestro país, y lo
hace
,
sorprendete
m
ente
,
con apoyo de
m
asas populares
. V
er có
m
o y porqué ocurre esto podría
ser un te
m
a de estudio y debate en alguna de nuestras reuniones
. P
or ahora resu
m
ire
m
os diciendo
que el fascis
m
o nació en un contexto deter
m
inado
: L
a
G
ran
G
uerra
(1914-1918)
produjo
m
uchas penalidades que provocaron revueltas de las clases bajas y que culminaron por la
Revolución Rusa de 1917 y la subsiguiente creación de partidos comunistas en los países
industrializados
. L
a burguesía se puso a la defensiva y generó el fascis
m
o co
m
o una reacción
hisrica a lo que parea anunciar el fin del capitalismo
. L
a finalidad o razón de ser del fascis
m
o
es enfrentar a obreros contra obreros
, m
ovilizar las clases populares contra fuerzas políticas que
pretenden
,
precisa
m
ente
,
liberar a las clases populares
. E
s claro que para conseguir eso es preciso
que los explotados no tengan conciencia de clase sobre su situación de explotados, es decir,
que ignoren todo sobre la lucha de clases
,
que no sepan nada de historia
,
ni de economía
L
a gente desinformada es fácil presa de quien quiera utilizarla en provecho propio
. Y
a vi
m
os
el engaño que persigue la propuesta de reducción de i
m
puestos
,
y recorda
m
os que la pertenencia
de
E
spaña a la
OTAN
se consagró por un referendum en el que una
m
ayoría de la población
voto a favor de ese paso tan dañino y peligroso para nuestro pueblo. Puede parecer extraño
e increíble que amplios sectores de la población voten y actúen en contra de sus propios
intereses
,
a favor de sus explotadores
,
pero en realidad esto es un esque
m
a bastante frecuente
en la historia
,
por eso el
m
undo está tan
m
al como está
. L
os cristianos conoce
m
os bien el caso
de la población de
J
erusalén que
,
al decidir entre
J
esús y
B
arrabás
,
eligió liberar a
B
arrabás y
condenar a
m
uerte a
J
esús
. E
n esa decisión estaba ya el ger
m
en de la desgracia que ese pueblo
sufriría
40
años
m
ás tarde
. L
o que significaba
B
arrabás conducía inevitable
m
ente a la guerra
contra los ro
m
anos que sea una gran catástrofe para el pueblo judío
. D
ecisiones nefastas co
m
o
esa la to
m
an actual
m
ente los pueblos cuando votan cada tres o cuatro años a partidos burgueses
,
y en referendums como el de la OTAN, o el de los ingleses sobre el BREXIT.
La propaganda fascista funciona como un banderín de enganche para gente muy diversa y
m
otivada por causas
diversas
:
racismo
, m
achismo
, x
enofobia
,
integrismo religioso
,
negacio-
nis
m
o
A
cada tipo le vende el discurso que le gusta
. P
ero al fascis
m
o no l
e m
ueven esas causas
.
S
u función es la defensa del capitalis
m
o
. S
e trata de
m
ovilizar desinfor
m
ados para que apoyen
en las urnas a los partidos fascistas y, llegado el caso
, m
ovilizar a los
m
ás violentos para actuar
en la calle como hacían las squadristi di combattimento de Mussolini y las S. A. de Hitler.
L
legado el caso
. H
e ahí lo sorprendente del fenó
m
eno del fascis
m
o actual
. H
oy no existen las
condiciones que generaron la aparición del fascismo en el siglo pasado. No existen partidos
comunistas potentes, la Guerra Fría culminó con la crisis del sistema socialista. En los
países industrializados los trabajadores votan masivamente a los partidos burgueses… Así
pues, ¿contra qué se moviliza el capitalismo actualmente? Diríase que está temiendo que se
reproduzcan las condiciones que le hicieron necesaria en su día la creación del fascismo
clásico, es decir, algo así como ponerse la venda antes de que se produzca la herida
. S
i esto es
así, es de te
m
er que ya se está conte
m
plando co
m
o inevitable que se produzca una Guerra
M
undial co
m
o la que en el siglo pasado puso en
m
archa todo el proceso
:
penalidades, descontento
popular, revoluciones proletarias, creación de potentes partidos proletariosLos conflictos
militares que están teniendo lugar en el mundo, incluso en Europa, hacen temer que nos
encaminamos a una catástrofe como las pasadas guerras mundiales. Los errores se pagan, y
nuestro
m
undo persiste en los errores que producen guerras y todo tipo de crisis: egois
m
o
,
violencia
,
explotación
,
depredación
N
uestro
m
undo sigue eligiendo continua
m
ente a
B
arras
y rechazando la enseñanza del
M
aestro
J
esús que se expresa en las Bienaventuranzas.
Las movilizaciones por la muerte de Mahsa Amini entran en su segunda semana y
su
m
an decenas de muertos mientras el Gobierno mantiene su política de mano dura
Se llamaba Hadis Najafi, tenía 22 años y murió de seis disparos en Karaj, a las afueras de
Teherán, según denunció su familia. Hadis se había convertido en uno de los símbolos de la
revuelta contra el uso obligatorio del hijab debido a unas imágenes que se hicieron virales de ella
recogiendo su pelo rubio en una coleta antes de una protesta. Un gesto tan habitual en otras partes
del mundo se convierte en un desafío cuando se trata de las calles de Irán y se tiene delante a las
fuerzas de seguridad que hacen frente a la revuelta social más grave de los últimos tres años.
Irán vive su segunda semana de movilizaciones tras la muerte de la joven Mahsa Amini a manos
de la Policía de la Moral. Ya son al menos 35 los muertos, según los datos oficiales, pero
activistas y organizaciones de derechos humanos aseguran que contabilizan muchos más. Las
autoridades han advertido de que no tolerarán más caos en las calles y consideran que las
movilizaciones están «alentadas por enemigos exteriores para derrocar a la república islámica».
Son más de cincuenta ciudades las que han registrado violentos choques con la Policía, desde el
Kurdistán iraní, zona de donde era original Amini, hasta las principales arterias de Teherán.
C
ada a que pasa es
m
ás co
m
plicado obtener infor
m
ación debido a los cortes de internet i
m
puestos por
el régi
m
en para dificultar la co
m
unicación de los
m
anifestan
-
tes
. A
esto hay que su
m
ar la detención de
reporteros locales
,
tal y co
m
o alerla
A
sociacn de
P
eriodistas de
I
rán
,
que pidió a las autoridades la
in
m
ediata liberación de los colegas arrestados mientras cubrían las protestas
. «R
ealizaban el dese
m
peño de
sus funciones profesionales», reza el comunicado de la asociación, en el que se informa también
que sus casas fueron registradas por la Policía.
Artistas y deportistas
A falta de líderes políticos en las calles capaces de liderar el enfado de miles de iraníes y ofrecer
una alternativa al sistema islámico, gente del mundo de la cultura o del deporte muestran su apoyo
a las manifestaciones en las redes sociales. El director de cine Asghar Farhadi, ganador de dos
premios Óscar, recurrió a Twitter para pedir «a todos los artistas, cineastas, intelectuales y
defensores de los derechos humanos de todo el mundo que muestren su solidaridad con el pueblo
de Irán grabando vídeos o escribiendo mensajes de apoyo». Desde el mundo de la música llegó el
respaldo de Kayhan Kalhor, quien denunció que la red social Instagram censuró parte de sus
contenidos, en los que mostraba su respaldo a las manifestaciones y criticaba al régimen.
La leyenda del fútbol nacional Alí Karimi, con pasado en equipos como el Bayern de Munich,
compartió una imagen de una serie de proveedores de VPN que los iraníes pueden usar para evitar
la interrupción de internet impuesta por el Gobierno y dirigió un tuit a los militares que obtuvo
más de 140.000 'likes' en el que escribió: «Una patria les espera. No dejen que se derrame sangre
inocente». La Guardia Revolucionaria reclamó el arresto de Karimi por su apoyo público a las
protestas, pero hace tiempo que Karimi vive fuera de la república islámica.
L
a
U
nión
E
uropea ta
m
bién reaccionó después de diez días de protestas y el
J
efe de
P
olítica
E
xterior
,
J
osep
B
orrell
,
declaró que espera que
«I
n aclare el nú
m
ero de muertes y arrestos, libere a todos los
manifestantes no violentos y brinde el debido proceso a todos los detenidos. Además, la muerte de
Mahsa Amini debe investigarse debidamente y cualquier responsable debe rendir cuentas».
L
as calles de Irán
m
antienen el pulso al régi
m
en en la
lucha contra el velo obligatorio
S
ordo ha la
m
entado que se esté abriendo un debate de rebaja de i
m
puestos
,
particular
m
ente a
los
m
ás ricos
,
cuando tenemos centros sanitarios cerrados
,
al personal de
A
yuda a
D
o
m
icilio
reclamando salarios con dignidad y una gran necesidad de más centros para mayores”.
El líder sindical, que ha comparecido ante los medios de comunicación en Santander, ha
calificado de “desvarío” este debate y ha exigido políticas que mejoren la inversión, los
ratios de personal y las herramientas necesarias para trabajar de la mejor manera porque “se
sigue regateando en Sanidad Pública y especialmente en Atención Primaria”.
La Atención Primaria resuelve el 90% de los problemas de salud de la ciudadanía, y es una
herramienta básica para la cohesión social y para la minimización de las desigualdades.
Pacto de rentas
Sordo ve “factible” lograr un pacto de rentas y ha instado al Gobierno a que, “si quiere
colaborar” a ello, ponga sobre la mesa “compromisos firmes” y lleve a los Presupuestos
Generales del Estado (PGE) de 2023 varias de las exigencias del sindicato, como el tipo
mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades o la de elevar el gasto sanitario al 7,5% del
PIB, destinando el 25% del mismo a atención primaria.
“Es momento de dejar de hablar y poner las propuestas encima de la mesa”, ha afirmado,
lamentando que, después de llevar meses hablando y “dando vueltas” a este pacto de rentas,
“nadie quiere poner el cascabel al gato”. Además, ha advertido que no habrá pacto de rentas
sin un pacto salarial “razonable” y ha subrayado la “voluntad” de su sindicato de intentar
llegar a un acuerdo salarial. También puedes leer Los sindicatos advierten que no es
momento de regatear subidas y mejoras a los trabajadores
Subidas salariales
Para ello, el secretario general de CCOO ha recordado que su sindicato plantea subidas de
salarios iniciales del entorno del 4,5% en 2022; del 3% en 2023 y del 2,5% para 2024, que
deben ir acompañadas de cláusulas de revisión salarial que permitan recuperar
paulatinamente el poder adquisitivo que están perdiendo los trabajadores.
“Es perfectamente posible negociar subidas salariales en estos términos, no tiene por qué
generar efectos inflacionarios”, ha defendido Sordo.
El líder sindical cree que para mover las posiciones empresariales hacia este acuerdo
salarial va a ser preciso “intensificar” las movilizaciones y darles un carácter
“intersectorial”. Otra “derivada” son, según ha dicho, las negociaciones de los convenios
colectivos que se están abordando.
“Exigimos políticas que mejoren la inversión,
los ratios de personal y las herramientas para
trabajar de la mejor manera porque se sigue
regateando en Sanidad Pública y sobre todo en
A
tención
P
ri
m
aria
”,
ha
m
anifestado
U
nai
S
ordo
,
secretario general de CCOO.
Lo que voy a decir aquí, vale solo para aquellos que se confiesan cristianos.
Quienes no lo son, podrán mirar el valor humano de los argumentos o decir
cínicamente “qué suerte la mía”. Pero quien quiere ser de veras cristiano,
debe saber que tiene obligación grave de pagar impuestos (progresivos,
democráticamente aprobados y con posibilidades de controlar el uso que se
hace de ellos, por supuesto): porque para el cristiano no son impuestos, sino
meras devoluciones. Es obvio que ahora hablamos de los impuestos directos,
no de los indirectos (el IVA): estos segundos son los que habría que rebajar, y
son más injustos porque no son progresivos, sino que afectan de igual manera
al muy rico y al pobre.
En efecto, según la enseñanza cristiana, la propiedad privada no es un
derecho sagrado, sino secundario: está al servicio de otro derecho más
primario que es el que los bienes de la tierra lleguen a todos los hombres.
Cuando impide esto, se convierte en un robo: de ahí la frase de san Juan
Crisóstomo tantas veces citada: “el rico es un ladrón o hijo de ladrón”, que viene
a ser la conclusión de otras muchas frases como estas, del mismo Crisóstomo:
“hurto no es solo arrebatar lo ajeno, sino también no dar parte de lo propio a
otros”. O “los ricos tienen lo que pertenece al pobre”; “no dar a los pobres de los
bienes propios es robarles y atentar contra su vida”.
Y naturalmente, el robo obliga a restituir para poder ser perdonado. Dejando
ahora de lado las conductas personales que esto pueda imponer a cada
individuo en particular, a nivel de la sociedad global los llamados impuestos
son un camino de practicar esta restitución. Si resultan injustos o mal
administrados, no vale como respuesta el negar la moralidad de los
impuestos, sino declarar una objeción de conciencia: hace os vivimos el
ejemplo (que no cuajó por demasiado minoritario) de gentes que detraían de su
obligación fiscal la parte que el gobierno destina a armamentos. Pero no para
quedársela ellos, sino para darla a una ONG o a Cáritas o mantenerla en
reserva.
Y esta misma es la enseñanza social de la Iglesia: cuando una persona tiene
cubiertas sus necesidades de manera suficiente y digna, el resto de sus
haberes deja de ser suyo. Por citar un poco a boleo, basta ver la Gaudium et
spes (ns. 69-71) del Concilio Vaticano II, la Populorum Progressio (n.22), de
Paulo VI o la Sollicitudo rei socialis (n. 42), de Juan Pablo II, o la Evangelii
gaudium y la Laudato si’ (93), de Francisco.
Quien quiera ser
cristiano,
tiene
la
obligacn
grave
de
pagar impuestos
Y para que se vea la utilidad de esta enseñanza (por imperfectamente cumplida
que esté) puede ser útil el siguiente dato que tomo del número de setiembre de
Le Monde Diplomatique en castellano: en tiempos de la Unión Soviética, la
persona s rica lo era 6 veces más que la más pobre; el o 2000 esa
proporción pasó a ser de 250.000”. Este dato clama al cielo tanto como la
dictadura de Stalin o la invasión de Ucrania. Y es inmoral gritar solo contra
aquellas inmoralidades cuya crítica nos favorece a nosotros, y silenciar las otras
que nos afectan también a nosotros.
Curiosamente, ahí estambién la razón de nuestra derrota ante la amenaza
ecológica. La propuesta de Ignacio Ellacuría de una civilización de la
sobriedad compartida como única solución para nuestro mundo, no vale
solo para el campo social, sino también para el problema ecológico.
(Nota Bene.- Doy por sentado y comprendo que todo lo dicho irritará
sobremanera a algunos lectores que reaccionarán recurriendo al insulto,
metiéndose conmigo, con la Compañía de Jesús o con la Iglesia. Acepto todas
esas críticas. Solo quisiera sugerir dos cosas a sus autores: a) que el recurso al
insulto suele ser una prueba patente de que no se tienen otros argumentos. Y
b) que el argumento del “tú más” no sirve para excluir el “pero yo también”: mi
pecado no excusa el tuyo y ahora estamos tratando del segundo, no del
primero. Del primero se puede hablar en otro momento.
Y recuerdo la advertencia anterior: lo aquí dicho va dirigido a quienes se
profesan cristianos: porque es enseñanza bíblica fundamental que a Dios hay
que servirle como Él quiere ser servido, no como nos gustaría servirle
nosotros).
E
ste tema de los impuestos, que aborda el artículo de José Ignacio
G
onzález
F
aus
,
es de
candente actualidad en nuestro país
. N
o es una cuestión
m
arginal
;
el tema tiene mucho
que ver con la lucha de clases
,
y no olvide
m
os que vivi
m
os en una sociedad clasista.
L
a
derecha política eshaciendo una bandera de su petición de “reducir impuestos
”,
su
oposición a
incre
m
entos fiscales
. P
arecen dar
por supuesto que tales recla
m
os tienen que
ilusionar a toda la poblacn y que constituyen una buen argu
m
ento para los partidos de
la derecha de cara a las elecciones que han de tener lugar más o menos pronto.
P
ero
, ¿
es un buen anuncio para toda la población
?. L
a esencia de una sociedad clasista es
que hay clases distintas con intereses distintos e incluso opuestos, contrarios, y a la(s)
clase(s) dominante(s) le(s) interesa que los dominados no sepan nada de todo esto. La
for
m
a en la que derecha política habla de i
m
puestos persigue el objetivo de
m
antener
en la ignorancia a la(s) clase(s) sojuzgada(s), que son la mayoría de la población.
H
ablan
m
uy a
m
bigua
m
ente de
i
m
puestos
”. ¿Q
i
m
puestos quieren bajar
? ¿
a qué subida
de impuestos se oponen? Hay i
m
puestos lineales
,
co
m
o el
IVA,
cuya modificación afecta a
todos por igual. Su subida afecta menos a las personas cuanto más ricas sean. Lo que
preocupa a los ricos son las subidas proporcionales al patri
m
onio que poseen; son estos
i
m
puestos precisamente los que el
PP
quiere bajar y no subir, aunque ello merme las
cotizaciones que sostienen los servicios sociales: sanidad, educación, jubilaciones…
No olvidemos los desastrosos efectos de los recortes de Rajoy en esos terrenos.
No hay nada peor que colocar en una subasta electoralista los
tributos que garantizan el Estado de bienestar
La política fiscal de un Gobierno es la columna vertebral que sostiene el Estado de
bienestar: no hay democracia cabal sin un sistema impositivo, progresivo y solidario
que proporcione los recursos necesarios para que el Estado haga frente a su política de
pagos. No hay remedio mágico contra el empobrecimiento económico, pero un
Gobierno dispone de los impuestos como arma clave para mitigar la desigualdad y
contrarrestar el aumento disparado del coste de la vida de las clases medias. En los
últimos días, hemos asistido a un debate sobre la fiscalidad que pone el acento en
aliviar los impuestos de una parte minoritaria y rica de la población mientras deja de
lado la necesaria solidaridad interterritorial.
Las dos reformas que España tiene pendientes son de calado: una reforma fiscal que
diseñe un sistema tributario para el siglo XXI y la del sistema de financiación
autonómica. La primera, comprometida con la UE para 2023 en el marco de los
fondos de recuperación Next Generation, se anticipa de dificilísima negociación ante
la toma de posición reiterada por el PP. Su defensa de una rebaja indiscriminada de
impuestos (sin distinguir si hay recesión o expansión, si hay déficit o superávit) se ha
erigido en banderín de enganche demagógico. Es una falsa solución que no
recomienda ni la OCDE ni el FMI ni ningún centro económico serio, y además es
insolidaria porque debilita al mejor instrumento de protección del que dispone la
inmensa mayoría de la población: unos buenos servicios públicos.
La segunda reforma pendiente desde 2014 es la financiación autonómica, donde se
enmarca la propuesta sobre el impuesto sobre el patrimonio de Andalucía. El régimen
actual otorga a las comunidades una capacidad normativa limitada, pueden establecer
impuestos de nuevo cuño si no se superponen ni invaden los centrales y pueden
modular los tipos estatales mediante recargos o bonificaciones. Imponer una exención
del 100% del impuesto, como es el caso, no solo contradice el espíritu de un
gravamen que es común aunque se gestione por parcelas, sino que representa una
renuncia a unos ingresos ahora más necesarios que nunca. Aunque la capacidad
recaudatoria de este impuesto es relativamente pequeña, en torno a 1.000 millones
anuales en toda España, su eliminación afecta a un porcentaje muy reducido de la
población, que es además el que menos angustias sufre en los malos tiempos.
La eliminación del impuesto sobre el patrimonio choca frontalmente con un PP que
ha labrado su perfil con apelaciones patrióticas a la unidad de España. ¿Contribuye a
la unidad la invitación a la fuga de cerebros, capitales o empresas de unas
comunidades autónomas a otras? Esta operación configura una competencia desleal o
dumping fiscal, e implica asimismo una dejación de la responsabilidad exigible a
todas las instancias administrativas y políticas. Renunciar a unos ingresos sin prever
dónde recortar el gasto supone exigir una futura compensación a las comunidades
contribuyentes netas o a la Administración General del Estado. Más disfuncional es
todavía cuando la propuesta parte de una comunidad receptora neta de la caja común
por la vía de la solidaridad interterritorial y abre una peligrosa vía hacia el parasitismo
tributario, es decir, el escenario grotesco en el que el beneficio otorgado a los 20.000
ricos andaluces deba ser financiado con recortes sociales a los más necesitados o con
un mayor esfuerzo fiscal de trabajadores y clases medias.
La inequidad de la medida es flagrante pero va acompañada de algo peor: una
renuncia parcial al IRPF que revela la cara ideológica de la medida. No persigue
evitar posibles concomitancias entre dos figuras impositivas para evitar una doble
imposición, sino que apunta a una rebaja generalizada de impuestos, como ha
propuesto de forma mal argumentada e inconsistente el PP nacional. Invocar las
rebajas de impuestos que ha decidido Alemania es una coartada tramposa: Berlín
reduce tipos a las rentas más bajas pero los incrementa a los tramos superiores.
Cualquier estrategia desfiscalizadora es hoy contraria a la más elemental cordura ante
la necesidad de afrontar la factura de la guerra en Ucrania y la lucha diaria contra la
inflación. Contradice también el impulso a nuevos impuestos que está desplegando la
Unión Europea y menosprecia el aumento de la desigualdad social (más de un 6% en
España desde la Gran Recesión de 2008). La clave de un sistema fiscal es no arruinar
su carácter redistributivo y afianzarlo ante las asechanzas de una coyuntura incierta:
unos países lo hacen con un impuesto específico global al patrimonio, como España,
Suiza o Noruega; otros gravan la riqueza con impuestos específicos a la posesión de
viviendas (como en Francia), o con figuras transversales (como el IRPF).
En un contexto de grave incertidumbre, no hay nada peor que colocar el debate fiscal
en una batalla política con tintes electorales. El Gobierno central tiene que explicar
todavía los detalles de su reacción a la irresponsable ofensiva popular. Crear un nuevo
impuesto que reemplace al de patrimonio puede ser inexcusable ante la evidencia de
que la vía de su reforma se ha ido cegando a medida que se vaciaba de contenido en
los gobiernos autonómicos, primero en Madrid y ahora en Andalucía. Pero es
importante que el diseño del nuevo tributo a las grandes fortunas evite la doble
imposición en los territorios que mantienen el impuesto sobre el patrimonio, no añada
complejidad al modelo y profundice en el carácter redistributivo del sistema fiscal.
Los impuestos que pagamos determinan directamente la calidad de los servicios que
recibimos. Excluir a los más ricos de sus obligaciones fiscales empobrece al Estado
de bienestar y debilita la confianza en la capacidad de la democracia para proteger la
equidad social.
Jesús Bastante
Ver tirados los alimentos en la basura o deteriorados por ausencia de los recursos
necesarios para hacerlos llegar a sus destinatarios es realmente vergonzoso y
preocupante. Rotundo, el Papa Francisco ha lamentado la cultura del descarte
que se esconde tras un problema, el del desperdicio de alimentos, que no podemos
dejar pasar de largo en este momento tan duro que estamos viviendo”.
E
n una carta dirigida a
Q
u
D
ongyu
, D
irector General de la FAO, con motivo del Día
Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, el
Papa denuncia que tanto la pérdida como el desperdicio de alimentos son hechos
verdaderamente deplorables porque dividen a la humanidad entre los que tienen
demasiado y los que carecen de lo esencial, porque aumentan las desigualdades,
generan injusticias y niegan a los pobres lo que necesitan para vivir dignamente.
¡Desechar comida es desechar personas!
E
l cla
m
or de los ha
m
brientos, privados de una forma u otra del pan cotidiano, debe
resonar en los centros donde se to
m
an las decisiones
,
recuerda el
P
apa
,
quien insiste
en que ese grito
no puede quedar silenciado o sofocado por otros intereses
. N
o en
vano
,
durante
2020
,
el
m
ero de personas que padecen hambre en nuestro planeta
au
m
entó significativa
m
ente debido a las
m
últiples crisis que afronta la hu
m
anidad
”.
¡Desechar comida es desechar personas!, apunta Bergoglio, recordando que ¡en
el mundo existe el alimento necesario para que nadie se vaya a la cama con el
estómago vacío! Se producen recursos alimentarios más que suficientes para dar
de comer a 8.000 millones de personas, apunta el Papa, quien recalca que los
alimentos no pueden ser objeto de especulación. La vida depende de ellos”.
Hay que detener la especulación alimentaria
Es un escándalo que los grandes productores alienten un consumismo compulsivo
para enriquecerse, sin siquiera considerar las auténticas necesidades de los seres
humanos. ¡Hay que detener la especulación alimentaria! Debemos dejar de tratar
Mensaje del Papa a la FAO por el Día Internacional de Con-
cienciación sobre lardida y el Desperdicio de Alimentos
.
Francisco exige “detener la especulación financie-
ra” que arroja a los alimentos a la basura mientras
millones de personas mueren de hambre.
los alimentos, que son un bien fundamental para todos, como moneda de cambio
para unos pocos, denuncia Bergoglio.
P
or otra parte
,
apunta el
P
apa
,
el desperdicio de ali
m
entos o la rdida de los
m
is
m
os
contribuye significativamente al incremento de las emisiones de gases de efecto
invernadero y, por lo tanto, al cambio climático y a sus dañinas consecuencias.
La tierra que explotamos ávidamente gime a causa de nuestros excesos
consumistas e implora que cesemos de maltratarla y destruirla invirtiendo el rumbo
de nuestras acciones, subraya Francisco, quien reclama especialmente a los
jóvenes y a su responsabilidad.
Olvido, mezquindad o codicia
En este asunto de tanta envergadura no podemos contentarnos con ejercicios
retóricos, que terminan en declaraciones que luego no logran llevarse a cabo por
olvido, mezquindad o codicia. Es hora de actuar con urgencia y buscando el bien
común, culmina el Papa, quien insiste en que es inaplazable tanto para los
Estados como para las grandes empresas multinacionales, para las asociaciones
como para los individuos
para todos sin excluir a nadie
, responder con eficacia y
honestidad al grito desgarrador de los hambrientos que reclaman justicia.
Cada uno de nosotros está llamado a reorientar su estilo de vida de manera cons-
ciente y responsable
,
para que ninguna persona quede postergada y a todas lleguen
los ali
m
entos que precisan, tanto en cantidad como en calidad. Se lo debemos a
nuestros seres queridos, a las generaciones futuras y a quienes se encuentran
golpeados por la miseria económica y existencial finaliza el escrito papal.